POR: Sergio Raglas
Eruviel Ávila, ex gobernador del Estado de México, ha generado controversia al separarse del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y unirse a la campaña de Claudia Sheinbaum, actual precandidata a la presidencia de la republica y miembro de Morena.
Esta decisión ha llevado a muchos a cuestionar los motivos detrás de su cambio de partido. Algunos especulan que Ávila podría estar buscando protección ante posibles investigaciones sobre su pasado. Se cree que podría tener mucho que esconder y al unirse a Morena, podría asegurarse de no ser investigado.
Otros creen que Ávila simplemente se dio cuenta de que el PRI ya no ofrece muchas oportunidades. Con Acción Nacional (PAN) tomando protagonismo político, es probable que las posibilidades de Ávila dentro del PRI sean limitadas. No tener acceso a puestos relevantes conlleva menos oportunidades de mantenerse en el poder. Es por esto que algunos piensan que Ávila podría estar esperando obtener una diputación o incluso de nuevo buscar el Senado para mantener su fuero político.
Independientemente de las razones detrás de su decisión, lo que es cierto es que esto representa una clara traición a sus principios y al partido que lo respaldó durante gran parte de su carrera política. El PRI lo ayudó a llegar a donde está hoy en día y unirse a la candidata de Morena podría ser interpretado como una falta de lealtad hacia aquellos que lo apoyaron.
Es importante destacar que estas especulaciones solo representan teorías y no se puede afirmar con certeza cuáles son las verdaderas intenciones de Eruviel Ávila al unirse a la campaña de Claudia Sheinbaum. Sin embargo, su decisión ha provocado controversia y ha dejado abiertas muchas preguntas sobre su verdadero objetivo y su lealtad hacia su partido.